de la

REAL PARROQUIA DE SEÑORA SANTA ANA (1266- 2016)

ANNA RADIX UBERRIMA

 

 

 

ACTO DE APERTURA


Ayer tarde, 10 de julio de 2016 a las veinte horas, una comitiva procesional encabezada por la cruz parroquial y constituida por las insignias y hermanos mayores de las hermandades de la feligresía presididos por el Sr. Arzobispo de Sevilla Excmo. Sr. D. Juan José Asenjo Pelegrina, salía de la Capilla de la Esperanza de Triana en dirección al templo de Santa Ana a los 750 años de su fundación. El calor acostumbrado a esta hora de verano pesaba en la calle Pureza que aparecía despejada y limpia al pausado avance de la procesión entonando la Letanía de los Santos.

El monumento más antiguo de Triana, iglesia y casa de los trianeros, lucía engalanada de gallardetes su esbelta torre, el atrio y sus alrededores. Dos pancartas con la imagen de la cruz parroquial del siglo XVII y la leyenda “Puerta Jubilar” flanqueaban la más antigua de Vázquez de Leca adornada de flores sus herrajes, brillantes los moldurones y limpia la madera, ante la que se detuvo la procesión. El Sr. Cura Párroco, D. Eugenio Hernández Martínez, leyó el texto del Evangelio en el que San Lucas relata la escena de Jesús en la sinagoga de Nazaret y a continuación el Sr. Vicario, D Manuel Azcárate Cruzado, dio lectura a la Bula de la Penitenciaría Apostólica en la que se anuncia que Su Santidad el papa Francisco, ha concedido la gracia de un Año Jubilar a la Real Parroquia de Santa Ana tal como le había solicitado nuestro arzobispo D. Juan José Asenjo con motivo del 750 aniversario de su fundación por el rey Alfonso X el Sabio agradecido a un milagro obrado en sus ojos enfermos gracias a la intercesión de Santa Ana, madre de la Virgen María. Los escudos de Castilla y León que la coronan desde el siglo XIII, se estremecieron cuando el Sr. Arzobispo, tras rezar la oración del ritual, golpeó con un martillo de bronce la puerta cerrada y esta se abrió entre un alto y potente repique de las campanas.

El templo, abarrotado de fieles, se llenó con la potente voz del órgano resonando bajo las bóvedas centenarias mientras la comitiva, presidida por el Sr. Arzobispo, enfilaba la crujía hacia el presbiterio para comenzar la celebración con el coro cantando el salmo de entrada. Representantes de las autoridades e instituciones del barrio y de la ciudad, de las hermandades y cofradías de Triana y de las fundadas en la Real Parroquia, ocupaban los primeros bancos al pie del altar.

La Eucaristía, concelebrada por el párroco, los vicarios de Santa Ana y otros sacerdotes del arciprestazgo fue seguida y participada con alegría, respeto y devoción por los numerosísimos fieles. En su homilía, el Sr. Arzobispo nos expresó los deseos y frutos que le imploraba al Señor en este tiempo de gracia que es el Año Jubilar en el que la comunidad parroquial es llamada por el Señor a la conversión y a la santificación: que fuésemos una comunidad viva, unida, fraternal, orante y misionera.

Con los agradecimientos del Sr. Arzobispo y del Párroco a los concelebrantes y a todos los que habían participado en este acto jubilar y tras la Bendición Papal especialmente concedida por el Santo Padre para esta ocasión, concluyó la Eucaristía con el canto de la Salve a la Stma. Virgen María.

José María Rubio Rubio

Secretario de la Comisión del 750 Aniversario

 

 

 

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LLAMADA DEL PÁRROCO A LAS HERMANDADES CON MOTIVO DEL AÑO JUBILAR

 

 

Un Año Jubilar es un tiempo de Gracia de Dios Nuestro Señor que, eterna es su misericordia, nos llama a la conversión, nos acoge y nos abraza como el padre al hijo pródigo concediéndonos su indulgencia. Para la comunidad parroquial, sus hermandades e instituciones, el Año Jubilar es una feliz oportunidad que el Señor nos brinda para purificar y vivificar la vida parroquial y no la podemos desaprovechar. Toda la vida de la parroquia, sus actividades y sus cultos, deben estar de alguna manera transformados por esta Gracia y así debe manifestarse durante todo el Año Litúrgico.

Los cultos de las hermandades parroquiales y aquellas de Triana que tradicionalmente los celebran en nuestro templo o nos visitan en su Estación de Penitencia, tienen en esta ocasión el valor añadido extraordinario que SS el Papa nos ha concedido y por el que sus hermanos y devotos pueden ganar el Jubileo. La Hermandad de la Virgen del Carmen de Santa Ana ha sido la primera en cruzar la Puerta Santa peregrinando desde la capilla de Ntra. Sra. del Rocío y cumpliendo las condiciones de la Penitenciaría Apostólica, esto es: Peregrinación al templo jubilar, Confesión Sacramental el mismo día de la peregrinación, ocho días antes u ocho días después y Comunión Eucarística el día de la peregrinación. Orar por las intenciones del Papa rezando un Credo, un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria.

Agradecido a las hermandades y cofradías que participaron en la Apertura del Año Santo, que resultó realmente solemne y admirable gracias a su colaboración, os invito a preparar y celebrar vuestros cultos anuales en el espíritu jubilar que este año nos convoca.


Sevilla, 17 de julio de 2016

Eugenio Hernández Martínez

Párroco

 

 

 

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ACTO DE CLAUSURA

 

El sábado 8 de julio D. Santiago Gómez Sierra, obispo auxiliar de la Archidiócesis, clausuró el Año Jubilar concedido por SS el Papa Francisco a la Real parroquia de Santa Ana con motivo del 750 aniversario fundacional y cuya Puerta Santa abriera el Sr Arzobispo D Juan José Asenjo el 10 de julio del año 2016. Tras sentidas y agradecidas palabras de nuestro párroco D Eugenio tuvo lugar la Eucaristía de Acción de Gracias a Dios Nuestro Señor por todos los bienes recibidos y para mayor honor y gloria de la Stma Virgen María y de su madre, Santa Ana como la mejor ofrenda a su titular y patrona y anticipo de sus cultos tradicionales.

El Año Santo ha sido una fuente de gracias espirituales para la parroquia y para toda la Iglesia de Sevilla. Desde los solemnísimos cultos a Señora Santa Ana del año 2016 con sus Eucaristías presididas por los obispos de Huelva y Jerez y D Carlos Amigo, cardenal emérito, hasta los peregrinos de Triana y de otras comunidades de la archidiócesis que visitando el templo y rezando por las intenciones del Jubileo, ganaron las indulgencias concedidas. Los cultos anuales de las HH y CC del arciprestazgo se han celebrado con el mismo espíritu jubilar. La procesión extraordinaria de Septiembre congregó a los trianeros y trianeras de ambos lados del río a los pies de la Santa Abuela.

El Sacramento de la Penitencia, la llamada a la conversión, el perdón y la misericordia de Dios han estado constantemente presentes en toda la vida parroquial durante este tiempo con jubileos especialmente dedicados a las familias, los abuelos, la paz del mundo, los fundadores, sacerdotes y servidores de la Real Parroquia. Los bautizos, las primeras comuniones, las bodas han compartido esta vivencia y la catequesis de iniciación cristiana y de adultos, para los que se ha inaugurado un nuevo salón parroquial. Las limosnas recibidas con la intención social del Jubileo han hecho posible que Cáritas disponga, al día de hoy, de unas nuevas dependencias acordes a sus necesidades.

Presididos por D Eugenio Hernández, nuestro párroco, la Comisión del 750 aniversario cuyos trabajos se iniciaron el año 2013 programó actos culturales, conferencias, conciertos y una magna exposición de sus tesoros artísticos que en dos meses recibió más de veinte mil visitantes. Otro hito ha sido el libro “Santa Ana de Triana. Aparato histórico-artístico” el cual, con excelente edición dirigida por la archivera de la parroquia, Dª Amparo Rodríguez Babío, resume la historia, el patrimonio y la vida de la parroquia a lo largo de estos siglos.

Todo esto no hubiera sido posible sin el patrocinio y la ayuda de organismos e instituciones religiosas – Sr. Arzobispo de Sevilla, Cabildo catedral, HH y CC, parroquias y órdenes religiosas – y civiles - Ayuntamiento de Sevilla, Tenencia de Alcaldía de Triana, Real Maestranza, Fundación CajaSol, Sevillana Endesa, Circulo Mercantil e Industrial…y sin la colaboración de los voluntarios y voluntarias de la parroquia, los servidores y los profesionales, arquitectos, maestro de obras, ingeniero, archivera, carpinteros, albañiles y su decisiva aportación en las labores de gestión, secretaría, administración, mantenimiento, priostía, cicerones… Gracias a ellos ha sido posible el montaje y la apertura de la exposición, la nueva iluminación de la parroquia, la restauración de obras de arte de muy alto valor, los actos y cultos celebrados y la edición del libro. Probada en la fe y en la esperanza, incluso en la enfermedad y las dificultades, en el feliz recuerdo de los colaboradores que ya celebran su Jubileo en el cielo, la Comunidad parroquial, eternamente agradecida, pide a Dios por ellos y por todos los que la han hecho posible: por SS el Papa Francisco que lo concedió, por nuestro arzobispo que lo solicitó y por todos los colaboradores.

Al finalizar el Año Jubilar Santa Ana es una comunidad renovada, más consciente y responsable de su misión, más alegre e ilusionada, más auténtica. Que por la intercesión de la Santa abuela, el Señor quiera que la semilla de la fe que un día sembramos sea cosecha de abundantes frutos del Espíritu para todos los que le ofrecieron a Santa Ana su tiempo, su ilusión, su aportación material, su trabajo y sus oraciones.

 

José María Rubio Rubio

Secretario de la Comisión del 750 Aniversario


 

 

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